¿Cómo afecta la edad a nuestra visión?
A pesar de algunos cambios en la calidad de la visión están relacionados con la edad y son inevitables, podemos ser capaces de mantener los ojos sanos para toda la vida.
Al igual que todos sabemos que nuestra fuerza física disminuye con la edad, nuestros ojos también sufren una disminución de su rendimiento, especialmente cuando superamos la barrera de los 60 años.
No debemos preocuparnos ya que estos cambios oculares como la vista cansada por ejemplo, estás relacionados con la edad, son perfectamente normales y no significan ningún tipo de enfermedad.
Incluso las cataratas, una patología muy vinculada con el envejecimiento de nuestros ojos, es extremadamente común entre las personas mayores y se pueden corregir fácilmente con una operación de cataratas, rápida y satisfactoria.
Solo en algunos casos, debido a la edad, se pueden desarrollar algunas enfermedades oculares más graves que pueden afectar nuestra visión y por ende, nuestra calidad de vida a medida que envejecemos. Hablamos del glaucoma, la degeneración macular o la retinopatía diabética.
Principales patologías oculares asociadas a la edad:
Vista Cansada o Presbicia
Vista Cansada o Presbicia: Al cumplir los 40 años notará que le costará más enfocar los objetos cercanos, esto es debido a la presbicia y no se alarme, es una pérdida de agudeza visual perfectamente normal por el endurecimiento de la lente dentro del ojo.
Aunque al principio no entorpecerá su vida diaria, la presbicia se intensifica a medida que envejecemos y quizás necesite corregir este defecto visual. Tras pasar los 50 años es fácil que note que necesite incluso unas gafas de cerca o cambiar de gafas más frecuentemente si las lleva.
Cataratas
Cataratas: A pesar de que las cataratas se consideran una enfermedad ocular relacionada con la edad, es algo tan común que quizás debiera ser clasificada como un cambio normal del envejecimiento. Por ejemplo, la operación oftalmológica más frecuente en España es la de cataratas, con unas 400.000 intervenciones al año, según los datos de la Sociedad Española de Oftalmología (SEO).
Por suerte, la cirugía de cataratas es extremadamente segura y tan eficaz que la tasa de éxito de recuperar la visión roza el 100%.
Degeneración macular
Degeneración macular: Está muy relacionado con la edad y es una de las principales causas de ceguera entra la población de edad avanzada.
Glaucoma
Glaucoma: El riesgo de desarrollar glaucoma aumenta porcentualmente con cada década después de haber cumplido los 40 años. Actualmente es una de las principales causas de ceguera en los países occidentales sólo por detrás de la diabetes.
La buena noticia es que con la detección temprana gracias a los exámenes oftalmológicos periódicos y las campañas de concienciación, permiten aplicar a tiempo el tratamiento adecuado para que podamos preservar la vista.
Retinopatía diabética
Retinopatía diabética: Es una complicación de la diabetes y una de las causas principales de ceguera. Ocurre cuando la diabetes daña a los pequeños vasos sanguíneos de la retina, que es el tejido sensible a la luz situado en la parte posterior del ojo.
Según los expertos el 40% de los diabéticos de más de 40 años tienen retinopatía diabética en algún grado.
Ojo seco
Ojo seco: A medida que envejecemos, nuestro cuerpo produce menos lágrimas. Especialmente en las mujeres después de la menopausia. Esto puede producir molestias en los ojos como una sensación de escozor, utilizar colirios o lágrimas artificiales, ayudarán bastante con este problema.
Pérdida de la visión periférica
El envejecimiento también provoca una pérdida de la llamada visión periférica. Se reduce el tamaño de nuestro campo visual a medida que vamos cumpliendo años y se agudiza al llegar a los 80 años. Una edad en la que es normal experimentar una pérdida del campo visual periférico, de 20 a 30 grados.
Disminución de la visión del color
Las células en la retina que son responsables de la visión del color, éstas experimentan una reducción en la sensibilidad a medida que envejecemos, causando que los colores sean menos brillantes y el contraste entre diferentes colores sea menos visibles.
Desprendimiento del vítreo
A medida que envejecemos, el vítreo, que es similar a un gel en el interior del ojo, comienza a licuarse y alejarse de la retina, causando manchas y destellos de luz. El desprendimiento vítreo, generalmente es inofensivo pero puede ser un síntoma del preocupante desprendimiento de retina.
Otros efectos del envejecimiento sobre nuestros ojos:
Aunque normalmente pensamos que el envejecimiento ocular solo se traduce en patologías como la Vista Cansada o Cataratas, se producen otros cambios más sutiles que afectan a la estructura del ojo. Estos cambios incluyen, por ejemplo, la reducción del tamaño de la pupila. A medida que envejecemos, los músculos que controlan el tamaño de la pupila y nuestra reacción a la luz pierden algo de fuerza. Esto hace que la pupila se vuelva más pequeña y menos sensible a los cambios en la luz ambiental. Debido a estos cambios, las personas de más de 60 años necesitan hasta tres veces más luz ambiente para una lectura cómoda que una persona joven. Además, las personas mayores son más propensas a ser deslumbradas por la luz del sol y el deslumbramiento, cuando salen de un edificio con poca luz, como una sala de cine.
Si has leído todo lo anterior, no queremos alarmarte. Seguir una alimentación y dieta saludable, realizar deporte moderado y no fumar, son sus mejores defensas naturales contra la pérdida de la visión a medida que envejece.
A pesar de algunos cambios en la calidad de la visión están relacionados con la edad y son inevitables, podemos ser capaces de mantener los ojos sanos para toda la vida.
Y recuerde la importancia de las revisiones oftalmológicas periódicas, estas le ayudarán a mantener sus ojos sanos y una visión óptima durante toda su vida.
¡Esperamos verte pronto dar el paso hacia una nueva vida sin gafas ni lentillas en VISIÓON Oftalmólogos!