Nadie quiere experimentar efectos secundarios tras su cirugía láser de miopía. Pero la realidad es que con casi cualquier cirugía, sea ocular o no, existe la posibilidad de tener efectos secundarios.

Lo mejor que se puede hacer es conocer los efectos secundarios que pueden ocurrir y saber exactamente lo que conllevan antes de someterse a una operación para corregir miopía, hipermetropía o astigmatismo con láser.

Aunque parezca lo más natural, aún hay gente que no se informa de los posibles efectos secundarios hasta después de una intervención ocular y no es consciente de los efectos secundarios hasta días después de la operación.

Comparada con otras cirugías, la cirugía ocular láser para corregir miopía, hipermetropía o astigmatismo tiene muy poco riesgo de efectos secundarios, pero uno de los más importantes es el deslumbramiento nocturno, también conocido como halo.

El deslumbramiento nocturno puede producirse en forma de halos o de destellos. Hay una pequeña diferencia entre ambos, los halos son como anillos que aparecen alrededor de las fuentes de luz, mientras que los destellos son el reflejo que se ve alrededor de las luces.

Cirugía de Miopía con Láser

Algunas personas pueden experimentar halos y destellos durante un par de semanas tras su intervención de miopía con láser, mientras que la mayoría de pacientes suelen no sufrir ninguna molestia. Cualquiera que sea el nivel de deslumbramiento nocturno que afecte a un paciente tiene que saber que es parte del proceso de curación natural del ojo.

Las alteraciones normales tras la intervención láser duran alrededor de tres meses. No es raro tener un poco de deslumbramiento nocturno residual después de este tiempo. Si se tratase de un problema verdaderamente grave que afectase a su visión se deberán hacer nuevas pruebas para identificar el origen del problema y determinar la forma en que se puede resolver.

Tener algunos destellos nocturnos es perfectamente normal y es parte del parte del proceso natural de curación después de la cirugía láser para miopía, hipermetropía o astigmatismo. Esto sucede porque la superficie de la córnea se deforma durante la cirugía, cambiando la forma en que se percibe la luz. Este período de reajuste y la curación que sigue es inevitable.

El mejor camino para evitar los halos tras la cirugía ocular láser es que su clínica Oftalmológica realice un examen preoperatorio completo y exhaustivo, con topografía de cara anterior y posterior de cornea, paquimetría de la córnea, examen de las aberraciones visuales de alto orden, pupilometría y examen bajo dilatación pupilar del fondo de ojo. En este examen se decidirá el diámetro de la zona óptica de la córnea a tratar en la intervención láser, evitando de este modo los halos o deslumbramientos.